"MC": SOFTWARE EDUCATIVO DE TUTORÍA Y PRÁCTICA PARA LA ENSEÑANZA DE ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE.
Jesús Valverde Berrocoso
JUSTIFICACIÓN TEÓRICA
Los mapas conceptuales son herramientas de representación del conocimiento. Sirven para expresar de modo gráfico, con textos escritos breves y líneas, las relaciones significativas entre determinados conceptos que, al combinarse, forman proposiciones. El mapa conceptual es, por consiguiente, un recurso esquemático utilizado para representar un conjunto de significados conceptuales incluidos en una estructura de proposiciones. Los mapas conceptuales proporcionan un resumen sintético de lo aprendido o conocido, ordenado de una manera jerárquica. El conocimiento está organizado y representado en todos los niveles de abstracción, situando los más generales e inclusivos en la parte superior y los más específicos y menos inclusivos en la parte inferior del mapa.
Los elementos fundamentales que componen un mapa conceptual son:
El mapa conceptual fue desarrollado por el profesor Joseph D. Novak y su equipo de la Universidad de Cornell (EEUU) en 1972 y descrito en numerosas publicaciones, entre las que destaca el libro titulado Learning How To Learn (Novak y Gowin, 1984). El objetivo fundamental de esta obra es que los profesores y alumnos "adquieran metaconocimiento, es decir, conocimiento sobre el conocimiento. [...] Lo esencial es que, si queremos mejorar enormemente el proceso educativo, los profesores [y] los aprendices [...] tienen que aprender más sobre el modo de aprender de los seres humanos y sobre su forma de crear conocimientos." (Novak, 1998: 124). Esta estrategia de aprendizaje está basada en la teoría del Aprendizaje Significativo de David Ausubel (1976).
Como demuestran los estudios realizados hasta el momento, los mapas conceptuales resultan muy útiles en las diversas etapas del proceso educativo: la planificación, la intervención y la evaluación.
En la planificación, como recurso para organizar y visualizar el plan de trabajo, evidenciar las relaciones entre los contenidos y resumir esquemáticamente el programa de un curso. Como instrumento de jerarquización y estructuración de los conceptos-clave, el mapa conceptual puede ser utilizado por el profesor como un organizador previo de los contenidos y como instrumento para el diagnóstico inicial de la situación de los alumnos con relación a un tema. El uso del mapa conceptual como organizador previo puede ser un medio idóneo para la planificación del curriculum y facilita enormemente la exposición de los contenidos a los alumnos al ofrecer, al mismo tiempo, una visión esquemática y global de aquello que se va a enseñar y aprender. Los organizadores previos, convertidos en mapas conceptuales, son especialmente útiles cuando (Pérez, 1985):
En la intervención, como una herramienta que ayuda a los estudiantes a captar el significado de los materiales que pretenden aprender. El uso del mapa conceptual en el aula ha de ser coherente con una teoría de la enseñanza que, en primer lugar, tenga como centro al alumno y no al profesor; en segundo lugar, que se ocupe del fomento de capacidades cognitivas de alto nivel y no exclusivamente del almacenamiento arbitrario de información; y, en tercer lugar, que busque un desarrollo global del individuo en sus dimensiones afectiva y social, no sólo intelectual. El uso del mapa conceptual como estrategia de aprendizaje y de enseñanza, ejerce influencias positivas en el ámbito emocional y socio-relacional de los alumnos, ya que el protagonismo, atención y aceptación que se presta a sus contribuciones, así como la mejora del rendimiento académico, favorecen el desarrollo de la autoestima. Por otro lado, el uso del mapa conceptual en la negociación de significados mejora las habilidades sociales y desarrolla actitudes favorables al trabajo en equipo y a la solución consensuada de los problemas (Ontoria et al., 1997). El valor del mapa conceptual no se halla sólo en su resultado final, en realidad su mayor interés pedagógico radica en el proceso que se implementa para su elaboración. La búsqueda de nuevas relaciones entre conceptos exige un gran esfuerzo por lo que el trabajo en equipo puede facilitar esta tarea de construcción y reconstrucción de mapas conceptuales.
En la evaluación, como recurso para la evaluación formativa. Permite visualizar el pensamiento del alumno, para así, corregir a tiempo posibles errores en la relación de los conceptos principales. Siempre dentro del marco del aprendizaje significativo, el uso de los mapas conceptuales como instrumento para la evaluación de los aprendizajes posibilita al docente definir el potencial de aprendizaje de los alumnos, sus conocimientos previos, el nivel organizativo de los conceptos en cada área de conocimiento, el establecimiento de vínculos significativos entre los conceptos y, por último, conocer los posibles errores conceptuales relativos a un determinado contenido no correctamente asimilado por los alumnos. Los mapas conceptuales son un medio óptimo para evaluar ya que su elaboración exige la comprensión significativa del contenido y, todo error, ya sea en la jerarquización de los conceptos, en otro tipo de relaciones o, simplemente, en su conceptualización, puede ser evaluado -sin mayores dificultades- por el docente y proponer a partir de ello la realización de nuevas acciones didácticas. La investigación educativa ha demostrado que los mapas conceptuales son válidos para medir las estructuras de conocimiento de los alumnos (Ruiz-Primo y Shavelson, 1996; Bolte, 1997; Jonassen, D.H. et al.,1997). El mapa conceptual puede ser también una herramienta para la autoevaluación de los alumnos. En este sentido la investigación de Stow (1997) muestra cómo el mapa conceptual es eficaz en el desarrollo de la metacognición. El uso de esta estrategia ayudó a los alumnos que participaron en el estudio a ser conscientes de sus propios aprendizajes sobre contenidos científicos y, por lo tanto, a autoevaluar con criterios más objetivos sus logros académicos.
Objetivos generales
La elaboración del software educativo MC se llevó a cabo bajo la guía de las siguientes finalidades pedagógicas:
1. Conocer las necesidades formativas de los alumnos con relación a la elaboración de mapas conceptuales, analizar sus causas principales y definir criterios para la intervención educativa.
2. Conocer el estado actual del software diseñado para la elaboración de mapas conceptuales.
2.1. Identificar y describir las aplicaciones informáticas más relevantes desarrolladas para el diseño y creación de mapas conceptuales.
2.2. Valorar, con criterios pedagógicos, el software analizado sobre mapas conceptuales.
3. Diseñar y elaborar un programa informático multimedia sobre el mapa conceptual con fines de tutoría y práctica, multimedia que ofrezca al usuario:
Diseño y elaboración de la aplicación multimedia
Como tarea previa al diseño y elaboración de la aplicación multimedia se realizó un análisis de los principales programas informáticos que tienen como finalidad la creación de mapas conceptuales. Los programas analizados fueron: Inspiration; MindMan; Decision Explorer; Concept System y Course Works. De modo global se puede afirmar que el software disponible en el mercado para la creación de mapas conceptuales facilita su elaboración y mejora la producción y presentación de estas representaciones gráficas del conocimiento. Hay que tener en cuenta que para su uso es necesario, además de familiarizarse con el programa informático en sí, conocer la teoría que lo sustenta, porque cada una de las aplicaciones analizadas posee un enfoque determinado sobre qué es un mapa conceptual y para qué sirve. Si la concepción coincide con la del usuario el software podrá ser fácilmente utilizado, en caso contrario es difícil que encuentre utilidad en su uso. No obstante, también es necesario constatar que, para elaborar mapas conceptuales, puede ser igualmente útil el empleo de un procesador de texto que ofrezca herramientas para el diseño (v.gr. Word posee dos herramientas de dibujo especialmente útiles para ello: la línea y el cuadro de texto). Desde un punto de vista educativo interesa más el proceso de elaboración que el resultado estético final del mapa conceptual.
Después de la revisión del software constatamos la necesidad existente entre la comunidad educativa de programas tutoriales y de práctica en el ámbito de las estrategias de aprendizaje. No tanto programas que faciliten la elaboración, por ejemplo, de mapas conceptuales cuanto que modelen su proceso de construcción. Las posibilidades del multimedia pueden ser explotadas en beneficio de productos que aprovechen algo más que la capacidad de almacenamiento y recuperación de la información.
La producción de la aplicación MC se ha llevado a cabo según el enfoque centrado en unidades u orientado a la escena (Bou, 1997) que, para el diseño de un software multimedia, considera las escenas o pantallas como unidades de significación. La organización del trabajo se ordena con relación a las siguientes tareas:
Para la organización de las diferentes pantallas del programa elaboré un grafo general, es decir un diagrama de las escenas con indicaciones, en forma de flecha, de las posibles rutas que el usuario puede seguir en la navegación por la aplicación. El grafo general describe el flujo entre grupos de escenas o capítulos que forman el software. Ofrece una visión global de la organización del contenido y de las relaciones entre sus componentes.
Como puede observarse en el grafo general, la aplicación titulada El mapa conceptual se organiza en cinco capítulos, cada uno de los cuales reúne un conjunto de pantallas que tratan un mismo tema (es necesario tener en cuenta que el número de cuadros representados en el grafo general no se corresponde con el número real de pantallas de la aplicación).
Desde el punto de vista de la navegación el grafo muestra la existencia de cuatro pantallas de presentación que contienen, respectivamente, una pequeña animación inicial; el título de la aplicación y nombre del autor; la solicitud del nombre del usuario y la posibilidad de establecer una breve interacción para autoevaluar su motivación respecto a la utilización del material informático y, por último, una pantalla de introducción informativa al programa que se describe y muestra más adelante. A partir de aquí el usuario llega a la pantalla Inicio desde la que puede optar por cinco rutas alternativas. Al Inicio se puede acceder desde cualquier pantalla de la aplicación; del mismo modo que se puede abandonar el programa en cualquier momento. No he añadido las flechas que representan esta doble posibilidad, existente en todas las pantallas con los botones Inicio y Salir, para evitar hacer ilegible el grafo general por la profusión de líneas.
La diferenciación en pantallas de primer, segundo y tercer nivel expresa la generalidad o especificidad de su contenido. Las pantallas de primer nivel contienen una información general sobre un contenido que, si se desea, puede ampliarse en las pantallas de segundo y de tercer nivel. Éstas últimas permiten realizar actividades de refuerzo del contenido antes mostrado. Los capítulos 3, 4 y el 5 (parcialmente) permiten al usuario hacer un recorrido lineal, además del que libremente puede elegir según sus intereses.
La pantalla Inicio actúa como menú principal o punto de partida para el uso del programa. En ella se contienen los títulos de los bloques temáticos en que se ha organizado el contenido del software. Contiene dos grandes apartados, gracias a la tipografía y la disposición de los textos: Los Conceptos y Los Mapas Conceptuales. En el primero se aborda la formación y la función de los conceptos. Con este contenido se pretende dar una visión global, sintética y clarificadora de qué son los conceptos, para que sirven y cómo se construyen. Es un contenido complementario, pero necesario y básico si deseamos enseñar a elaborar mapas conceptuales ya que, como es evidente, constituyen su materia prima y, desgraciadamente, no siempre el alumno tiene una conciencia clara de su significado y alcance, lo cual repercute negativamente en la producción de los mapas. La correcta asimilación de este contenido facilitará la comprensión de la técnica y de las razones que apoyan el uso educativo del mapa conceptual. En el segundo bloque los contenidos se centran, exclusivamente, en la estrategia de aprendizaje propiamente dicha con el fin, en primer lugar, de conceptualizarla, posteriormente de informar sobre el proceso que se ha de seguir en su creación y, por último, ofrecer un conjunto de actividades cuya finalidad es modelar la elaboración real de mapas a partir de tres textos cuidadosamente seleccionados y elaborados. A esta pantalla de Inicio se puede volver desde cualquier pantalla del programa de un modo inmediato, facilitando de este modo los intereses y/o necesidades que el usuario tenga en cada momento y ofreciendo, de forma fácilmente accesible, un esquema claro de los contenidos que alberga este software educativo.
Las actividades que se describen a continuación constituyen el elemento más novedoso del programa, ya que tratan de modelar de principio a fin el proceso de elaboración de un mapa conceptual de modo interactivo con el usuario. Se han diseñado unos ejercicios que van más allá de las simples actividades de acierto y error, al pretender que el alumno adopte, en todo momento, decisiones razonadas. No es útil un aprendizaje mecánico del proceso porque la elaboración de mapas conceptuales es una labor compleja y creativa que no puede automatizarse.
Existen tres textos sobre los que el usuario de la aplicación puede elaborar un mapa conceptual. Los temas son variados: los métodos de enseñanza de la lectura, el aprendizaje significativo y los tipos de software educativo. Son textos claros y preparados para facilitar la realización de los mapas conceptuales. Una vez que se elige un texto, y éste aparece en pantalla, la primera tarea que se debe realizar es hallar los conceptos que en él aparecen. Se ofrece la opción de imprimir el texto por si el alumno prefiere desarrollar esta actividad con lápiz y papel. En cualquier caso, todas y cada una de las palabras del párrafo son interactivas y ofrecen información al usuario sobre su naturaleza conceptual. Pulsando sobre cada una de las palabras se despliega una ventana informativa que aclara si la elección ha sido correcta o no. Si se ha pulsado sobre un concepto se produce una modificación en la apariencia del texto escrito. Antes de pasar a la siguiente pantalla el alumno ha debido localizar todos los conceptos puesto que se le pregunta por el número de ellos que ha encontrado. Si la cifra es incorrecta se emite un mensaje de error y, automáticamente, se vuelve a la pantalla anterior para que el usuario halle los conceptos que le faltan o haga un recuento acertado de su número. Si la cifra es la correcta el programa conduce a la siguiente pantalla donde se han de clasificar los conceptos en tres grupos o categorías: conceptos fundamentales, generales y específicos. A la derecha aparecen todos los conceptos seleccionados en un listado desorganizado. Cuando el usuario pulsa sobre ellos aparece un cuadro de diálogo que pregunta por la categoría conceptual en la que se debe integrar. Si la elección no es la adecuada el programa emite un mensaje de error y el alumno debe volver a pulsar sobre el concepto para modificar su selección. Cuando la categoría escogida es acertada aparece un nuevo menú que pide al usuario que justifique su opción con relación a tres. afirmaciones. Cuando se elige la correcta el concepto pasa a ocupar su espacio correspondiente. Para confirmar la ejecución del ejercicio se ha de indicar, en la parte inferior de la pantalla, cuál es el número de conceptos fundamentales, generales y específicos. Si los dígitos son los correctos el programa pasará automáticamente a otra tarea previa a la elaboración del mapa conceptual. Aquí la tarea es más sencilla que en los ejercicios anteriores puesto que simplemente se trata de ubicar espacialmente los conceptos según su jerarquía. Para ello se han diseñado tres espacios denominados nivel 1, nivel 2 y nivel 3. En la parte superior (nivel 1) deberán ir los conceptos más generales y en la parte inferior los más concretos (nivel 3). Para efectuar la interacción en esta pantalla, el usuario debe pulsar sobre los botones rojos que contienen la denominación de los tres grupos de conceptos y elegir en que nivel colocarlos. Cuando la elección es correcta el programa automáticamente muestra, dentro del espacio acotado de color gris, todos los conceptos que se han clasificado en cada categoría.
Una vez realizado el ejercicio y tras responder a una pregunta de comprobación el usuario puede pasar a la siguiente pantalla. A partir de esta página se comienza a diseñar el mapa conceptual. Se ofrece un mapa mudo en el que los conceptos están colocados por niveles. Existen vínculos entre ellos que están representados por medio de líneas. El alumno debe dotar de contenido al mapa pulsando en cada uno de los recuadros y eligiendo, dentro del listado de conceptos que se despliega, el que considere que debe ocupar ese lugar. Al lado de cada cuadro existe una ayuda que el alumno puede utilizar para facilitar una elección razonada. A medida que se hacen elecciones correctas se va rellenando el mapa con los conceptos. La actividad se da por concluida cuando todos los conceptos han sido colocados en su ubicación correspondiente. Cuando las elecciones no son correctas el programa emite un mensaje aclaratorio con el fin de hacer comprender el error y estimular al alumno a que reflexione sobre sus decisiones. A continuación es preciso definir las palabras-enlace que aclaran la relación entre los conceptos. Estas palabras se colocan sobre la línea que une los conceptos. El modo de interacción es similar al anterior ya que el usuario sólo tiene que pulsar sobre el botón y escoger entre el breve listado de palabras-enlace la que considere que expresa mejor la relación conceptual. El resultado final es el siguiente:
Tras una pregunta de comprobación, el programa pasa a la siguiente pantalla, con la que concluye el ejercicio. En ella se evalúa el nivel de comprensión que posee el alumno sobre el contenido propuesto al comienzo de la actividad y convertido posteriormente en un mapa conceptual. La evaluación se lleva a cabo con la formulación de una batería de preguntas de opción múltiple. Esta evaluación permite al usuario comprobar su nivel de adquisición de aprendizajes y el grado en que la elaboración del mapa conceptual le ha ayudado a comprender mejor el contenido. No se puede continuar si alguna cuestión no ha sido respondida correctamente. El programa indica en ese caso la/s respuesta/s no acertada/s. Una vez cumplimentada adecuadamente la prueba, se pregunta al usuario si desea continuar con otra actividad. En caso afirmativo se vuelve a repetir el proceso ya descrito pero con otro texto elegido por el alumno.
Bibliografía
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"MC": SOFTWARE EDUCATIVO DE TUTORÍA Y PRÁCTICA PARA LA ENSEÑANZA DE ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE.
DATOS DE LOS AUTORES: Jesús Valverde Berrocoso (Dpto. de Ciencias de la Educación - Facultad de Formación del Profesorado - Universidad de Extremadura- Campus Universitario - Avda. de la Universidad s/n - 10071 Cáceres -E-mail: jevabe@tajo.unex.es
RESUMEN Este trabajo presenta un software educativo sobre estrateigas de aprendizaje orientado a la tutoría y la práctica. En concreto, aborda los fundamentos teóricos que subyacen a la estrategia del mapa conceptual y analiza diversos programas informáticos diseñados para su elaboración. La aplicación multimedia contiene aspectos informativos relativos a los conceptos (formación y función) y al mapa conceptual como herramienta para la construcción de conocimientos (definición y procedimiento para la elaboración). Además, permite al usuario, a través de diversas actividades, profundizar en los procesos de conceptualización de la realidad, así como elaborar diferentes mapas conceptuales a partir de textos escritos.
ABSTRACT This work presents an educational software on learning estrategies guided to the tutorship and the practice. In short, it approaches the theoretical foundations that underlie to the strategy of the concept map and it analyzes diverse programs computer specialist designed for their elaboration. The application multimedia contains relative informative aspects to the concepts (formation and function) and to the concept map as tool for the construction of knowledge (definition and procedure for the elaboration). Also, it allows to the user, through diverse activities, to deepen in the processes of conceptualization of the reality, as well as to elaborate different concept maps starting from written texts.
DESCRIPTORES Software educativo; habilidades cognitivas; estrategias de aprendizaje; mapa conceptual.
KEYWORDS Educational software; cognitive skills; learning strategies; concept map.
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